Tres mujeres, mucho talento, buenas ideas, esfuerzo y trabajo. Es el caso de Noa Blanco, Ane Marín y Gadea Martínez, que han creado un material novedoso con las cáscaras de moluscos que desechaban las empresas conserveras. Ellas mismas reconocen que no todo ha sido un camino de rosas, pero poco a poco trabajando y aprendiendo de sus errores, van dando forma a la solución que plantean: la utilización de residuos, concretamente cascaras de moluscos para la obtención de un material similar al mármol para destinarlo a la fabricación de elementos de construcción diversos como la encimera de la cocina de nuestra casa o mobiliario urbano como los bancos, por ejemplo.
Han trabajado con una firma gallega que les ha facilitado cáscaras de mejillón, zamburiña y almejas. Una vez rotas en pedazos, las muelen. El polvo es mezclado con resina y, tras varias pruebas, han dado con la fórmula. Tras su paso por la feria de ciencias Exporecerca en Barcelona, recientemente han participado en la experiencia The Challenge de Educaixa, donde siguieron trabajando y mejorando su proyecto y puliendo su enfoque empresarial. Y lo debieron de hacer bien, porque fueron más de 100 los proyectos presentados y el suyo fue uno de los 15 seleccionados. ¿El premio? un viaje formativo a Nueva York del 27 de junio al 8 de julio, donde podrán recibir orientación y consejos de referentes profesionales e innovadores.
Zorionak eta aurrera!